Washington, D.C.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una exención temporal de un mes sobre los aranceles automotrices para México y Canadá, según confirmó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
La decisión, tomada tras conversaciones con los principales fabricantes de automóviles, busca evitar desventajas económicas para las empresas mientras se ajustan a las nuevas regulaciones comerciales.

“Hablamos con los tres grandes concesionarios de automóviles. Vamos a dar una exención de un mes a cualquier automóvil que venga a través del T-MEC”, declaró Trump en un comunicado leído por Leavitt.
Los fabricantes beneficiados incluyen a Stellantis, Ford y General Motors. No obstante, la funcionaria advirtió que los aranceles recíprocos entrarán en vigor el 2 de abril y que la administración está abierta a considerar futuras exenciones.
El anuncio generó un impacto inmediato en los mercados financieros. El Dow Jones registró un repunte de 540 puntos, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq Composite subieron un 1,2% y un 1,49%, respectivamente. Las acciones del sector automotriz también reflejaron la noticia con alzas significativas: Ford (5,3%), Stellantis (9,1%) y General Motors (7,7%).
Ante la medida, la presidenta de México expresó su postura de defensa del libre comercio y reiteró la importancia de mantener un trato justo para la industria automotriz mexicana. “Seguiremos dialogando con nuestro principal socio comercial para garantizar que nuestras empresas y trabajadores no sean afectados por políticas que generen incertidumbre en los mercados”, afirmó en conferencia de prensa. También destacó que México continuará promoviendo la inversión extranjera y fortaleciendo su competitividad en el sector.

En su mensaje, la mandataria subrayó que el T-MEC ha sido clave para el desarrollo económico de la región y que cualquier modificación en las condiciones arancelarias debe evaluarse con base en principios de cooperación y beneficio mutuo. Asimismo, instó a las empresas automotrices a aprovechar este periodo de gracia para consolidar estrategias que fortalezcan su presencia en el mercado estadounidense.
El gobierno mexicano continuará en conversaciones con la administración de Trump y con representantes del sector automotriz para buscar soluciones que garanticen la estabilidad económica y comercial entre ambos países.