Texas.- El alambre de púas sigue a lo largo de una sección disputada de la frontera entre Estados Unidos y México un día después de que la Corte Suprema de Estados Unidos votó a favor de permitir que los agentes federales de la Patrulla Fronteriza retiren la barrera instalada allí como parte de la iniciativa de seguridad del gobernador republicano de Texas, mientras que el desafío legal del estado sigue su curso.
El alto tribunal falló el lunes por 5-4 en una victoria para el presidente Joe Biden en la disputa en curso con Texas sobre si la Patrulla Fronteriza tiene la autoridad legal para cortar el alambre de púas instalado por Texas en las orillas del río Grande.
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El estado demandó el año pasado para detener el corte de alambre, alegando que destruye ilegalmente la propiedad estatal y socava la seguridad con el fin de ayudar a los migrantes a cruzar la frontera. En diciembre, un tribunal federal de apelaciones ordenó a los agentes de la Patrulla Fronteriza que pusieran fin a esta práctica mientras se desarrolla el proceso judicial, y este mes el Departamento de Justicia presentó una solicitud de emergencia, pidiendo a la Corte Suprema que anulara esa decisión.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, y su Departamento de Seguridad Pública reafirmaron este lunes el uso de barreras erigidas por el Estado.
“Esto no ha terminado”, escribió Abbott el lunes en X. “El alambre de púas de Texas es un elemento disuasorio eficaz contra los cruces ilegales que Biden fomenta. Seguiré defendiendo la autoridad constitucional de Texas para asegurar la frontera e impedir que el Gobierno de Biden destruya nuestra propiedad”.
Texas “mantendrá su postura actual en la disuasión de cruces ilegales de la frontera mediante la utilización de medidas eficaces de seguridad fronteriza”, escribió el lunes en la plataforma el portavoz del Departamento de Seguridad Pública, el teniente Chris Olivarez, afirmando que “Texas es el único estado que utiliza todas las estrategias y recursos para proteger su soberanía, combatir la actividad criminal y desalentar la inmigración ilegal”.
Además de la colocación del alambre de púas, Abbott ha enviado decenas de buses con personas migrantes a Washington y a varias otras ciudades gobernadas por demócratas.
También instaló una polémica barrera de boyas en un tramo del río Bravo que separa la frontera entre Texas y México, e impulsó una ley para criminalizar a las personas migrantes que cruzan de forma irregular la frontera, ambas medidas muy criticadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
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Según una carta del Departamento de Seguridad Nacional obtenida en exclusiva por CNN, el Gobierno de Biden informó a las autoridades estatales que tenían de plazo hasta el 17 de enero para dejar de bloquear el acceso de la Patrulla Fronteriza a un tramo de 3,2 kilómetros a lo largo de la frontera entre EE.UU. y México que incluye Eagle Pass o el Departamento de Justicia de EE.UU. intervendría.
Con información de CNN Español e Informador Mx.