Houston, Texas. – Anggy Díaz, de 21 años, fue encontrada muerta y desmembrada en su casa de Texas, sus suegros fueron los que descubrieron el terrible crimen, sin embargo, lo que nunca se imaginaron es que su esposo Jared Dicus confesó que él la había decapitado. El hombre se encuentra recluido en la cárcel, pero con fianza de $500,000.
Una cuenta de GoFundMe fue creada pidiendo donaciones para pagar por sus gastos fúnebres. Dania Díaz, madre de la joven, asegura que se hará ‘justicia divina’ mientras tanto busca la forma de repatriar el cuerpo a Nicaragua, su país natal.
“Mi niña es única, es especial, ella era una niña fuerte, una niña que siempre andaba alegre, la alegría de las personas es envidiable, entonces hay personas que les ofenden las sonrisas de otros”, dijo la señora Díaz.
La mujer agregó que cuando recibió la noticia estaba en la iglesia, orando por sus cuatro hijos. Dania es la madre biológica de Díaz y comparte la crianza con su hermana en Nicaragua con quien la joven vivió durante muchos años, hasta que logró reunirse nuevamente con ella al llegar a EEUU buscando una vida mejor.
“Nadie está preparado para esto, estamos sobreviviendo en un país donde venimos por sueños, por nuestras metas y pues nos hacen faltas tantas cosas, la alegría, la felicidad, la paz, nos hacen falta tanto monetaria como espiritualmente tantas cosas”, concluyó la mujer.
La tía de la joven, Idis Díaz, la recordó en Facebook como alguien que disfrutaba la vida y era amada por su familia.
La policía encontró sangre en la casa y el cuerpo mutilado de Díaz. Su esposo, Discus, aún estaba en la casa y fue arrestado. Las autoridades sospechan que se usó un cuchillo en el asesinato. Según dijo un vecino, estaba en shock ya que Discus no parecía alguien que hiciera algo violento.
“Los últimos 3 años siempre fue la misma, no cambiaba. Ella llegaba a la tienda y era una estrella. Estaba llena de luz”, confiesa Jiménez sobre si la hispana sufría algún tipo de violencia, la jefa fue contundente al decir que no.
Otras de las declaraciones de la jefa Verónica Jiménez es sobre las responsabilidades que tenía la hispana. Cuenta que ella llegó a Estados Unidos: “Para ser alguien. Tenía muchos sueños”. Y, uno de esos sueños, era reunir siempre la mayor cantidad de dinero para enviarle a su madre en Nicaragua con el propósito de que comprará medicamentos para tratar su cáncer.
Cabe destacar que sobre cómo se conoció la hispana con su esposo, Jiménez reveló que curiosamente fue en la tienda donde trabajaba Díaz, mencionó algo que los investigadores ya están analizando, y es que el mismo día en que ocurrió el asesinato de la mujer de 21 años, su esposo estuvo en la tienda, tomó varios productos y no los pagó.
La madre, familiares y amigos confían en que se haga justicia por Anggy.
Con información de Univisión y People.
Te sugerimos leer:
Empresarios de Playa del Carmen y Cancún se suman a Movimiento Ciudadano
Invertirán 9 millones de pesos para construir edificio para la policía de Bacalar
Gobierno del Estado instalará mesas de diálogo con ejidatarios de Tihosuco